El tejido de nuestra resiliencia.

Queridas amigas,

Esta mañana, entre las noticias de Vatican News encontré una que me hizo estremecer: “Cada minuto 15 personas en el mundo pierden la vida por falta de acceso a la sanidad, por los impactos de la crisis climática, por el hambre y por la violencia de género.” (Fuente: Informe de Oxfam, La pandemia de la desigualdad). Ante esta consternaste  información ¡Dios nos libre de quedar enredadas en la “globalización de la indiferencia” que denuncia reiteradamente el Papa Francisco!

Prosigue Vatican News: “En los dos primeros años de la pandemia, los diez hombres más ricos del mundo duplicaron con creces sus activos, pasando de 700.000 millones de dólares a 1,5 billones, a un ritmo de 15.000 dólares por segundo, 1.300 millones de dólares al día”.  En el otro extremo encontramos los que en esta crisis están pagando más alto precio: los más pobres y frágiles, en particular las mujeres, las “invisibles” para los ojos de muchos.

Como mujeres de la UMOFC las invito a que nos preguntemos: ¿Qué nos diría hoy Pilar Bellosillo, mujer que lideró nuestra organización y nos mostró el camino hacia la santidad? ¿Cómo reaccionaría y qué nos propondría ante esta realidad? Algunos hechos de su vida pueden iluminar nuestras respuestas. En 1966 lanzó una encuesta sobre la mujer en la familia, la sociedad y la Iglesia, enviada a 36 millones de mujeres católicas de las organizaciones afiliadas a la UMOFC. Así, se “escucharon las voces” de las mujeres y se percibieron los “gritos” de las más discriminadas. Esta encuesta reforzó la Liga Mundial contra el Hambre, que había sido fundada anteriormente por Pilar, y que hoy es Manos Unidas.

A partir de esa encuesta surgió un plan de acción orientado a hacer evolucionar las situaciones inhumanas. Se estableció una red de colaboradoras en todos los continentes. En 1969, Pilar partió para África y visitó a organizaciones de varios países para promover una educación renovada. En 1974 se celebró la Asamblea General en Tanzania bajo el lema: “La UMOFC agente de cambio para una sociedad más justa”, pues Pilar decía que la mujer es la primera víctima de la injusticia.

Por éstas y otras razones, queridas amigas, las convoco a “poner manos a la obra” en el OBSERVATORIO MUNDIAL DE LAS MUJERES (OMM), el nuevo proyecto de la UMOFC que providencialmente está empezando cuando, como con una lupa, los dos años de emergencia han mostrado y agudizado las llagas que padecían ya las mujeres en las zonas más carenciadas de nuestros países y continentes, al mismo tiempo que han evidenciado sus fortalezas y resiliencia.

Hemos puesto el Observatorio bajo el patrocinio de Pilar Bellosillo, intentando seguir sus huellas. Estamos seguras que ella ha intercedido para que ofreciéramos los primeros frutos del OMM a la Iglesia en América Latina y el Caribe, que tomó nuestro informe como material de trabajo para su Asamblea Eclesial Continental. Estamos preparando el OMM en África, para lograr escuchar y que se manifiesten las mujeres más sufrientes, a fin de encontrar juntas, inspirar y promover en la Iglesia, los gobiernos y  la sociedad, soluciones  a sus padecimientos.

Es por eso que la UMOFC decidió empezar una recolección de fondos y junto al envío de la oración para el Día de la UMOFC, 13 de mayo 2022, les hemos enviado y está en nuestro sitio, el lanzamiento de la Campaña de Oración y Recolección de Fondos para el Observatorio en África, que será desarrollada en distintos pasos. El primer paso, como siempre, es entregarnos a la oración. Concretamente les pido que diariamente le digan a Pilar, como a una amiga cercana: “Ruega por nuestro Observatorio en África”. Y, si es posible, recen también cada día, la oración por la causa de canonización de Pilar (adjunta), encomendándole ésta y todas sus intenciones.

Estoy convencida que las mujeres de la UMOFC tenemos una enorme capacidad de reacción ante la crisis global si nos decidimos y nos comprometemos a “tejer” soluciones en común, desde la “resiliencia” de cada una. El TEJIDO DE NUESTRA RESILIENCIA es precisamente esa red espiritual, moral y concreta que, por la gracia de Dios nadie podrá romper, y que nos permitirá salir al encuentro de las mujeres que más sufren y aliviar sus heridas, sostenerlas como en una red, potenciar sus características y que pasen a formar parte de ese mismo tejido resistente para acoger a otros hijos e hijas de Dios como hermanos y hermanas, transformando poco a poco este planeta en una Casa Común.

Las saludo con afecto,

María Lía Zervino, Servidora

Presidente General de la UMOFC

ORACIÓN

Señor Dios y Padre nuestro, te damos gracias por la fecunda vida de Pilar Bellosillo , por su testimonio de entrega a la causa del Evangelio, por su amor a la Iglesia, por su trabajo intenso y responsable en el camino de la renovación en el espíritu del Concilio Vaticano II.

Te damos gracias por el impulso que dio al laicado eclesial y por su implicación constante en la promoción de las mujeres. 

Confiados en su intercesión, ponemos en tus manos la gracia que te pedimos nos concedas, y que nos hagas también a nosotros testigos valientes y comprometidos de la fe. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.