El Papa Francisco, durante la audiencia general de los miércoles, continúa sus catequesis sobre la ESPERANZA.

Como mujeres de la UMOFC, tenemos la responsabilidad de sembrar esperanza, especialmente en la familia, entre los jóvenes y personas que sufren con una atención específica a las mujeres.

Si consideramos la destrucción, los conflictos, las guerras, las persecuciones, los actos de terrorismo en todo el mundo es muy difícil cultivar la esperanza, tener un corazón abierto hacia el futuro. Sin embargo, esta es nuestra tarea, no podemos rendirnos, no podemos dejarnos vencer por la desesperación, la depresión. Como dijo el Papa Francisco durante la audiencia general del 23 de agosto: “Nosotros creemos y sabemos que la muerte y el odio no son las últimas palabras pronunciadas sobre la parábola de la existencia humana. Ser cristianos implica una nueva perspectiva: una mirada llena de esperanza. Algunos creen que la vida retenga todas sus felicidades en la juventud y en el pasado, y que el vivir sea un lento decaimiento. Otros aún retienen que nuestras alegrías sean solo episódicas y pasajeras, y en la vida de los hombres esté inscrito el sinsentido. Los que ante tantas calamidades dicen: «Pero, la vida no tiene sentido. Nuestro camino es el sinsentido». Pero nosotros cristianos no creemos esto. Creemos en cambio que en el horizonte del hombre hay un sol que ilumina para siempre. Creemos que nuestros días más bonitos deben llegar todavía. Somos gente más de primavera que de otoño. A mí me gustaría preguntar, ahora —cada uno responda en su corazón, en silencio, pero responda—: «¿Yo soy un hombre, una mujer, un chico, una chica de primavera o de otoño? ¿Mi alma está en primavera o está en otoño?». Que cada uno responda. Observamos los brotes de un nuevo mundo antes en vez de las hojas amarillentas de las ramas? Nos acunamos en nostalgias, arrepentimientos y lamentos: sabemos que Dios nos quiere herederos de una promesa e incansables cultivadores de sueños”.

Este es un estímulo extraordinario para las mujeres de la UMOFC que están dispuestas a sembrar y difundir la esperanza en cada realidad.

Este mes celebramos el nacimiento de la Virgen María: Que Ella, Reina de la Paz y Reina de la UMOFC, nos ayude a realizar nuestra misión.

ORACIÓN COLECTA DE LA SANTA MISA DEL 8 DE SEPTIEMBRE

Concede, Señor, a tus hijos el don de tu gracia,

Para que, cuantos hemos recibido las primicias de la salvación

Por la maternidad de la Virgen María,

Consigamos aumento de paz en la fiesta de su Nacimiento.

Por nuestro Señor Jesucristo.

OTRAS LECTURAS:

Audiencia general 23 de agosto 2017

Evangelii Gaudium 76-77; 84-86.