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Informarse, Formarse y Transformarse
Prepararnos para asumir nuestro liderazgo en una Iglesia Sinodal en misión.
¡Cuántas cosas buenas han estado pasando recientemente en la Iglesia! Particularmente con el inicio del proceso sinodal y el caminar del Pueblo de Dios hacia una Iglesia de la comunión, participación y misión que se acerque más a todos, especialmente a los más necesitados y vulnerables. Con el Santo Padre a la cabeza, nos hemos puesto cada vez más en las manos del Espíritu Santo que, sin duda, nos está iluminando para descubrir los designios del Señor en este momento de la historia.
Con gran esperanza vemos cuántas iniciativas van surgiendo, en diversos grupos y comunidades, para juntos vivir “en un estilo sinodal”; para aprender a dialogar, a escucharnos unos a otros y a tomar decisiones siguiendo el método de la Conversación en el Espíritu. ¡Con cuanta ilusión esperamos los cambios que se van produciendo en la vida de la Iglesia durante este proceso y los que vendrán una vez finalizada la segunda fase de la Asamblea Sinodal!
Sin embargo, veo con tristeza cómo algunas nubes turban este presente y futuro tan esperanzadores. No había siquiera empezado la primera fase de la Asamblea sinodal cuando surgieron cuestionamientos que podían haber quitado el centro de la atención en el trascendente acontecimiento sinodal. Gracias a Dios esto no sucedió por la oportuna y clara intervención del Santo Padre. Ya iniciado el Sínodo, pronto surgieron rumores, la gran mayoría de ellos sin fundamento. Habiendo tanta información falsa que nos inunda por las redes, que sólo contribuye a desinformar y a provocar la polarización, conviene estar atentas e ir a la fuente original; evitemos dejarnos engañar por “el padre de la mentira”. Basta simplemente con leer la Relación de Síntesis de la Primera Sesión ordinaria de la Asamblea Sinodal para darse cuenta de que muchas de las cosas que se dijeron eran simples rumores o errores sin fundamento.
Para estar bien informados, lo mejor es siempre recurrir a las fuentes oficiales que, en este caso, son la página Web del Vaticano: www.vatican.va la del sínodo, que está dentro de la primera, www.synod.va/es y la agencia de noticias del vaticano: www.vaticannews.va Todas estas páginas están en varios idiomas, incluyendo nuestros 3 idiomas oficiales. Te invito a recurrir siempre a estas fuentes y no a mensajes de WhatsApp, Twitter o de cualquier otra red social; mensajes que la gente simplemente reenvía sin detenerse siquiera a pensar en su origen ni en su veracidad.
Aunado a lo anterior, el 18 de diciembre de 2023, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe publicó la Declaración Fiducia supplicans sobre el sentido pastoral de las bendiciones. Ante la confusión que se suscitó, vinieron diversas interpretaciones oficiales para aclarar su contenido. Tanto el Dicasterio para la Doctrina de la fe, como el propio Santo Padre, han insistido firmemente, en diversas ocasiones, en que con la mencionada declaración la Iglesia no modifica en modo alguno su enseñanza perenne sobre el matrimonio; la Iglesia, por tanto, no bendice ni puede bendecir el pecado; la Iglesia únicamente puede bendecir al hombre pecador, para que se reconozca como parte del designio de amor del Señor y se deje cambiar por Él. Por lo tanto, dadas las condiciones necesarias y siguiendo el parecer del Obispo del lugar, el acercar a quienes viven de manera irregular al amor y la verdad de Nuestro Señor no implica en modo alguno que validemos su comportamiento.
En fin, estoy firmemente convencida de que nosotras, mujeres de la UMOFC, tenemos la responsabilidad de estar bien informadas y formadas, conociendo y siguiendo la doctrina y el Magisterio de la Iglesia, bajo la guía del Santo Padre. Tenemos la responsabilidad de seguir trabajando por una Iglesia sinodal que se acerque a los que más la necesitan. Tenemos también la gran misión de ser un elemento fuerte de unión y reconciliación cuando la ignorancia, la desinformación, la soberbia o tal vez la cerrazón y el fanatismo impiden a algunos reconocer la verdad. Por todo ello les propongo, con esperanza, lo siguiente:
Ánimo, estamos siendo testigos y coprotagonistas de momentos trascendentales para la vida de la Iglesia. Asumamos nuestra misión con responsabilidad, esperanza y alegría.
Un abrazo grande a todas,
Mónica Santamarina
Presidenta General de la UMOFC